Azul cobalto, oscuro, pigmento Kremer (cód. 45700)

El azul cobalto es un pigmento relativamente nuevo. Fue descubierto por Leithner en 1775, aunque su producción industrial no comenzó hasta principios del silgo XIX. Desde entonces, se ha convertido en un pigmento indispensable en todas las técnicas artísticas, incluido el pastel, gracias a su característico tono suave pero intenso, el cual tiende ligeramente a la azurita. Sus efectos con particularmente bellos en medios acuosos, que permiten degradar las tonalidades oscuras hasta un azul suavemente claro. En técnicas al óleo debe mezclarse con aceites claros, como el de adormidera o nuez, para prevenir el reverdecimiento del tono que otros aceites más amarillos pueden producir. Sus propiedades secantes naturales contrarrestan la lentitud de secado de aquellos aceites. Debido al peso de sus partículas, tiende a separarse del aceite, lo que puede acarrear inconvenientes en los tubos: añadir una carga o cera de abeja puede evitar este efecto, pero es aconsejable usar siempre pintura recién preparada. Al moler el pigmento, se debe tener cuidado en no añadir demasiado aceite: si la pasta se vuelve líquida, debe añadirse más cantidad de pigmento. El dominio de las proporciones para conseguir un balance equilibrado entre pigmento y aceite se va adquiriendo con la práctica. Sus propiedades humectantes son buenas en todos los medios, su poder cubriente y su capacidad colorante son más moderadas. El azul cobalto es el pigmento más caro de entre los más corrientes en las paletas de hoy día. Pero es también el único absolutamente estable a la luz y resistente al agua, lo que lo hace ideal para la pintura al fresco. Ello, junto al singular efecto visual que la suavidad de su tonalidad produce, lo convierte en un clásico favorito entre los artistas. Nosotros sólo suministramos las mejores calidades.