Cola de pescado en escamas amarillas casi transparentes, elaborada con vejiga de esturión ruso sin tratar. Las colas de origen animal son fáciles de utilizar, resistentes al envejecimiento, disolventes al calentarse y, por tanto, especialmente fáciles de reparar. A diferencia de los pegamentos sintéticos, se pueden esmaltar y grabar fácilmente. También es adecuado como capa base para pintar y dorar.
Agregar agua fría permite macerar el pegamento y luego calentarlo suavemente al baño maría.
Dadas las limitaciones de la cuota de pesca, esto es una verdadera rareza.