El índigo es un pigmento orgánico con un tono azul negruzco y algo apagado. Las plantas de las que se puede obtener el índigo se encuentran en muchas partes del mundo. La planta que le da nombre, Indigofera tinctoria L., es originaria de la India.
Como pigmento artístico, el índigo se ha encontrado en pinturas romanas del siglo I d. C., en miniaturas de la Alta Edad Media y en pinturas de todos los períodos de la pintura de relevos europea. La evidencia más antigua, sin embargo, proviene de excavaciones y data del año 3000 a.C. Nota: El índigo indio auténtico tiene un olor intrínseco típico.
El índigo es insoluble tanto en agua como en alcohol.
Es adecuado para témpera, acuarela, óleo, acrílicos, tintes.